Aparece en un espacio libre dentro del alcance un espíritu celestial, feérico o infernal con una forma a tu elección: araña, comadreja, búho, caballito de mar, cangrejo, cuervo, gato, halcón, lagarto, murciélago, pez (mordedor), pulpo, rana (sapo), rata o serpiente venenosa. Este actúa independientemente pero obedeciendo tus órdenes, en su turno según su iniciativa. Si sus puntos de golpe se reducen a 0, desaparece sin rastro. Reaparecerá al lanzar este conjuro de nuevo. Solo puedes tener un familiar. Si lanzas este conjuro teniendo uno, este adoptará una nueva forma a tu elección.
Puedes comunicarte con él telepáticamente hasta 100 pies. Puedes usar tu acción para ver y oír a través de sus ojos y oídos durante el turno, disfrutando de los sentidos especiales que posea, pero permanecerás sordo y ciego respecto a tus propios sentidos.
Al lanzar un conjuro con un alcance de toque, puedes hacer que tu familiar sea quien toque al objetivo. Debe estar hasta 100 pies de ti y usar su reacción para tocar al
objetivo. Si se requiere una tirada de ataque, utiliza tu modificador.
Aprendes el conjuro Encontrar Familiar y puedes lanzarlo como un ritual. Este conjuro no cuenta dentro de tu límite de conjuros conocidos.
Cuando lo lances, escoge entre una de las formas habituales para un familiar o una de las siguientes formas especiales: diablillo, duende, pseudodragón o quasit.
Además, cuando llevas a cabo la acción de atacar, puedes renunciar a uno de tus ataques para permitir a tu familiar realizar uno de sus propios ataques utilizando su reacción.